El análisis de suelo detecta excesos y deficiencias que impiden el desarrollo óptimo del cultivo.
Corregir los desequilibrios en el suelo favorece el pH óptimo, la disponibilidad de nutrientes, la retención de humedad y la proliferación de los microorganismos benéficos.
El análisis de suelo nos da una base por la cual podemos empesar a regenerar los suelos. Es nuestra guía para poder formular planes de nutrición específicos a su cultivo.